LA AUTÉNTICA SABIDURÍA TOLTECA PARA TRANSFORMAR Y EMPODERAR NUESTRO SER

«Tolteca es quien tiene la voluntad creadora de labrarse un rostro y un corazón, un destino propio y de crear las condiciones favorables para acumular poder personal y evolucionar dentro de la escala cósmica». Así es como Acic Oklahoma nos describe su travesía por el mundo mágico de la Cosmovisión Tolteca, en donde ese enorme caudal de conocimiento se encuentra de modo potencial en el interior de los seres humanos y sólo requiere la llave apropiada para su manifestación.

Mediante técnicas disruptivas y originales, Acic se enfrenta a su propio destino y es obligado a recurrir al desarrollo de sus facultades interiores para poder trascender en el universo del Nagual. Un universo en donde los fenómenos naturales que oscilan entre la vida y la muerte, suelen ser pasajes necesarios para la vida de un Guerrero del Conocimiento.
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En este tomo, Acic nos plantea la posibilidad de transformarnos como personas en cualquier propósito que previamente hayamos definido. Nos transmite que no existen límites específicos para explorar los secretos latentes de la realidad ordinaria cuando tenemos el poder personal para acceder a ellos.

Sobretodo en un mundo tan complicado como el de hoy, sus técnicas nos ofrecen una alternativa eficaz para resolver aquellas incógnitas sin respuesta: «Los resultados que en otros caminos de superación espiritual se logran conseguir en años de dura faena, en el sendero del Nagual pueden alcanzarse en meses con las técnicas originales del Conocimiento Tolteca».

También nos relata su encuentro con la enigmática sociedad de los Tzinacan u «Hombres Murciélago» del sureste mexicano. Entre los misteriosos encuentros con esa realidad mágica, la transformación de Acic se torna en transmutación interior. Situación que nos lleva a imaginar las experiencias místicas de la vida discipular en el sendero del Nagual y la atractiva propuesta para liberar nuestra naturaleza espiritual del cautiverio racional.

Esta crónica está aderezada en un contexto histórico poco conocido que enriquece los enfoques lineales de la historia oficial. Los lectores hallarán en sus páginas un refrescante néctar para el espíritu y el conocimiento de una concepción del mundo antiguo adaptada para estos tiempos, aunque muy diferente a la visión moderna, pero que bien puede contribuir a resolver los conflictos humanos más íntimos de nuestra psicología.

Por último, Acic define el Conocimiento Tolteca como disruptivo, porque rompe con toda la lógica de ideas convencionales y nos lleva a una visión extraordinaria del Universo.